España: ¿Elecciones navideñas? La crisis de España, la crisis del PSOE, y los egos de Rajoy y Sánchez

El 20 de diciembre de 2015 los españoles fueron a las urnas y, el vencedor de esas elecciones fue el Partido Popular (PP), presidido y liderado por Mariano Rajoy.

Obtuvo el PP en el Congreso de los Diputados una mayoría simple de 123 escaños (63 menos que en 2011) y un 28,71 % de los sufragios.

Por su parte, el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) de Pedro Sánchez, obtuvo el 22,01 % de los votos, lo que le represento 90 diputados (20 menos que en las anteriores elecciones y, su peor resultado en la actual democracia).

El bipartidismo (PSOE-PP) deja de ser los todo poderoso pues irrumpen dos nuevos jugadores y esto hace que ninguno de los partidos grandes obtenga la mayoría para poder constituir gobierno.

El partido liderado por Pablo Iglesias, de Podemos, se presentó por primera vez a unas elecciones generales y logra 42 diputados (un 12,69 % de los votos) que, sumado a las coaliciones electorales autonómicas, como En Comú Podem (12 parlamentarios, 3,69 % de los votos), Compromís-Podemos-És el moment (9 diputados y, 2,67 % de los votos) y En Marea (con 6 diputados y, 1,63 % de los votos), todas ellos vinculados a Podemos y otras formaciones de izquierda, le dieron un total de 69 diputados y el 20,68 % de los votos. Para complejizar aún más el panorama, el otro partido emergente, Ciudadanos-Partido de la Ciudadanía, con Albert Rivera al frente, obtuvo 40 diputados (un 13,94 % de los votos)

Después de varios meses de negociaciones entre los partidos no se logra construir una mayoría, por lo cual hubo que disolver las Cortes, y hacer un nuevo llamado a elecciones, esta vez para el 26 de junio de este año.

Los españoles vuelven a las urnas y, tal como estaba previsto el PP aumenta un poco su ventaja electoral, obteniendo ahora 137 diputados, 14 más que en las anteriores elecciones.

El PSOE por su parte, sufre un revés y pierde 5 diputados quedando ahora con 85, Ciudadanos corre con la misma suerte, perdiendo 8 y quedando con 32 diputados, y Unidos Podemos, logra sumar dos adicionales para un total de 71 parlamentarios.

Nuevamente se tranca el juego, ningún partido tiene la mayoría para conseguir la investidura y entran en un proceso de negociaciones frenéticas que nos trae al día de hoy.

Hasta ahora las negociaciones no han dado fruto a ninguno de los dos competidores más fuertes (Rajoy y Sánchez)  y tienen como fecha fatal, el 31 de octubre para lograr constituir una mayoría y evitar así una nueva disolución de las Cortes e ir a unas nuevas elecciones que, de acuerdo a los lapsos establecidos, serian para el próximo 25 de diciembre.

En el ínterin, se realizaron elecciones en Galicia y en el País Vasco y el PSOE, vuelve a retroceder, lo que le pone la guindilla al pastel de la crisis de PSOE.

Pedro Sánchez se aferra a su posibilidad (cada día más remota) de ser investido, y ganarle la partida a Rajoy, pero para ello debe hacerlo con el apoyo de Unidos Podemos y Ciudadanos, quienes están en trincheras ideológicas opuestas.

Este arreglo a tres (PSOE, Unidos Podemos y Ciudadanos) y, según muchos analistas, es casi una misión imposible, mucho más con las derrotas recientes en Galicia y el País Vasco.

Mientras todo esto sucede, Rajoy se mueve sigilosamente, tratando de lograr armar la mayoría con Ciudadanos y varios pequeños partidos locales, pero tampoco lo tiene fácil, por lo habrá que esperar hasta el 31 de octubre, fecha en que este proceso de investidura termina, sino hay acuerdos.

Hasta aquí, el enredo político en que se encuentra España, pero la pregunta que habría que hacerse es ¿Cuánto afecta esta inestabilidad política a los españoles?

España sigue teniendo altas tasas de desempleo, que afecta principalmente a los más jóvenes. Hay zonas de España donde el desempleo entre los menores de 25 años llega al 40%. Este fenómeno tiene impacto entro drama social y es en la inseguridad, que si bien aún es baja, ha venido repuntando en los últimos años.

Los españoles, aún no han salido de la crisis y recesión que afecto a buena parte del mundo y principalmente a países como Portugal, Grecia, Irlanda, la propia España, entre otros, así que esta incertidumbre genera serias perturbaciones en la economía, en las empresas que no sienten confianza en la conducción del estado, en los mercados financiero internacionales, y por supuesto a los españoles, especialmente a los más humildes y con menos recursos.

Esta coyuntura, es un reto para la democracia española, pero sobre todo es una oportunidad para que los dirigentes políticos puedan demostrar si son simples dirigentes o son líderes a carta cabal, capaces de superar sus diferencias, de hallar coincidencias y, sobre todo, darle estabilidad y tranquilidad a la democracia, a Europa y, en especial, a todos los españoles.

El mundo, está cambiando a pasos agigantados, todo evoluciona muy rápido, y las sociedades por supuesto, van a ese ritmo. Los líderes políticos, que tienen en sus manos la posibilidad de transformar las vidas de los ciudadanos, también tienen el gran reto de ir al ritmo de la evolución del mundo y sobre todo, escuchar con mucha atención, a sus ciudadanos.

Esperemos que Rajoy y Sánchez escuchen a los españoles, que entiendan el mensaje que los ciudadanos les están enviando con los resultados electorales de las dos últimas elecciones. El bipartidismo en España llego a su fin y hay que construir nuevas alianzas, cuyo epicentro sean los ciudadanos y sus requerimientos.



		

El autor