Victoria corta. EE.UU elecciones de mitad de período.
Por: @OrlandoGoncal
Los EE.UU celebraron sus elecciones de medio período, donde se renovaba la totalidad de la cámara de representantes con 435 en total y un tercio del senado, en este caso 35 de los 100 senadores.
Esta elección adicionalmente, se escogían 36 gobernadores del total de los 50 estados, e igualmente se designarán 35 fiscales federales, los cuales son encargados de aplicar la ley a nivel estatal y asesorar al gobierno local y además, se nombrarán 27 secretarios de Estado quienes son los responsables de los procesos electorales, así como a 28 tesoreros de Estado.
Para hacer un poco más compleja la elección en paralelo, se celebraron referendos sobre la cuestión del aborto en cinco estados -California, Vermont, Michigan, Kentucky y Montana-, bien sea para proteger este derecho o restringirlo.
El partido republicano había anunciado que habría una enorme ola roja -color del partido- que cubriría a todo el país, sin embargo, los resultados hasta ahora dan a entender que tal ola, no paso más de ser una pequeña ola capilar, es decir que apenas hubo movimiento.
A la hora de escribir este artículo, la ventaja de los republicanos sobre los demócratas en la cámara de Representantes es de apenas 204 sobre 187, cuando ya solo queda en juego menos de 44 curules en esa cámara, por los cual el control de la cámara si bien por ahora pareciera que queda en manos de los republicanos, con las curules en juego, o bien los republicanos tendrían una mayoría muy endeble, o hasta pudiera -quizás poco probable- que los demócratas retuvieran el control de la cámara.
Por otro lado, en el Senado van cabeza a cabeza con 49 senadores para los republicanos y 48 para los demócratas, por lo cual la elección aún sigue en el aire, pero en este caso la mayor probabilidad de controlar la cámara quede nuevamente en manos de los demócratas.
Eso pone a la batalla por el Senado sobre los estados de Nevada y Arizona, donde aún no hay un claro ganador y en el estado de Georgia donde deberán ir a una segunda vuelta para definir esa curul.
¿Cómo se pasó de la gran ola, a una ola capilar?
Varias variables entran en juego, a saber:
Efecto Trump. Quizás la arrogancia, lo hiperpolarizante y agresivo del discurso de Trump ya no tiene la potencia de antes, la penetración hacia las bases electorales, como las tuvo en 2016. Habría que preguntarse ¿Qué pasaría si el efecto Trump, no hubiese estado en la palestra?, ¿le hubiese ido mejor al partido republicano? Lo cierto es que varios de los candidatos apoyados por Trump, no lograron ganar su elección.
Por otra parte, para los estadounidenses, el tema económico es vital, pues su capacidad de ahorro es muy reducida y cuando hay aumentos -de alimentos, combustibles, alquileres, etc.- eso tiene un efecto muy negativo sobre el partido gobernante. Sin embargo, pareciera que, a pesar de haber tenido un récord de inflación de los últimos 40 años, la lenta pero progresiva recuperación de la economía, sumado a la recuperación de los empleos, le resto preponderancia al tema, minimizando su efecto negativo sobre el electorado.
Otro elemento que definitivamente cambio el escenario fue el tema del aborto. La Corte Suprema de Justicia, con una mayoría conservadora, al emitir un fallo muy poco habitual, pues el alto tribunal revocó su propia e histórica sentencia de 1973 que era el precedente legal que garantizaba el derecho a la interrupción voluntaria del embarazo a nivel federal.
Al hacer esto una parte importante del electorado sintió que se le estaba quitando un derecho adquirido y el partido demócrata tuvo una clara lectura del tema y puso el tema en el debate público con lo cual una supuesta victoria conservadora en las cortes generó un efecto contrario en las elecciones.
Otro factor determinante, fue el comportamiento de la generación Z y parte de la generación Millennial, quienes votaron mayoritariamente por los demócratas, y esto sin dudas inclinó la balanza en algunos estados.
Hay muchísimos más factores, pero sin dudas estos tres son importantes.
Las preguntas ahora son: ¿Se ha debilitado el proyecto Trump?, ¿Sobrevive el presidente Joe Biden a esta elección?
Con respecto a la primera pregunta, es claro que Trump se ha debilitado, pero siendo como es, -literalmente un tractor que siempre avanza- seguramente buscará reponerse, claro que un le queda en el camino el juicio en New York y la investigación por los hechos del asalto al congreso, lo cual pudiera frustrar sus aspiraciones.
Con respecto a la segunda pregunta, el presidente Biden, perdiendo el control de una de las cámaras, pues tendrá que entrar en un proceso de negociación constante con los republicanos, lo cual hará que muchos de sus planes e iniciativa o bien se las bloqueen o en su defecto se las retrasen, lo cual tendrá un impacto directo sobre su gestión.
Otro elemento hacia el futuro del presidente Biden es las crisis en el ámbito internacional -invasión a Ucrania, crisis climática, migración, etc.- las cuales tendrán efectos sobre su gestión.
Por lo pronto, los republicanos obtienen una victoria corta y los demócratas la celebran.
Imagen: www.elmundo.com
